Baroida

Conoce este café en detalle

Ben Colbran fue pionero en el cultivo de café en PNG. En 1963 compró Finca Baroida de 242 hectáreas y comenzó cultivando frutas y verduras hasta que poco a poco consiguió ahorrar suficiente dinero para realizar su gran sueño: una finca de café.

Este café ha sido procesado mediante un proceso natural clásico. Tras la cosecha, los frutos maduros se seleccionan cuidadosamente y se extienden en camas elevadas, donde se dejan secar al sol durante varias semanas.

Durante este tiempo, se mueven regularmente para asegurar un secado uniforme y prevenir el desarrollo de mohos o fermentaciones no deseadas.

Este proceso permite que los azúcares y compuestos presentes en la pulpa de la fruta se impregnen en el grano, aportando una complejidad aromática y un perfil de sabor dulce y afrutado.

Conoce al productor

Baroida: historia y sabor desde las tierras altas de Papúa Nueva Guinea

Papúa Nueva Guinea no suele ser el primer país que viene a la mente cuando hablamos de café de especialidad. Sin embargo, en las montañas de la provincia de Eastern Highlands se encuentra una finca que ha marcado un antes y un después en la producción cafetera del país: Baroida Estate. Esta finca no solo destaca por la calidad excepcional de sus lotes, sino también por la historia de esfuerzo y visión que la respalda.

Todo comenzó en 1963, cuando Ben Colbran, originario de Nueva Zelanda, se trasladó a Papúa Nueva Guinea junto a su esposa y sus tres hijos. Movido por el sueño de cultivar café, adquirió una finca de unas 242 hectáreas en el distrito de Kainantu. Pero como suele suceder con los grandes proyectos, no pudo empezar directamente con el café: primero plantó frutas y verduras, como fresas, brócoli o col, para generar ingresos que luego reinvertiría en su verdadera pasión.

Con el tiempo, Ben logró reunir los recursos necesarios para desarrollar su finca cafetera, a la que bautizó como Baroida, en honor a un espíritu ancestral que, según la tradición local, habita en una gran roca que permanece inmóvil en medio del río, sin moverse ni siquiera en las peores crecidas.

Un entorno privilegiado para un café excepcional

La finca se sitúa entre los 1.700 y 1.850 metros de altitud, en el punto donde se encuentran el valle del río Lamari y la cordillera del monte Jabarra. Esta ubicación privilegiada y el entorno volcánico ofrecen unas condiciones ideales para el cultivo de variedades como Arusha y Bourbon, que encontramos en este lote natural de la cosecha 2024.

Una de las principales dificultades que enfrentó Ben al inicio fue la adaptación de las técnicas de cultivo. El método keniano tradicional para plantar café resultó ineficaz en las tierras húmedas de PNG, donde las precipitaciones superan los 2.000 mm anuales. La solución llegó mediante la creación de zanjas de drenaje entre las hileras de cafetos, algo que todavía hoy se sigue aplicando en la finca bajo la dirección de Nichol Colbran, el hijo de Ben, que retomó las riendas del proyecto en 1997 tras haber vivido prácticamente toda su vida en la finca.

Tradición, innovación y colaboración local

Hoy, Baroida abarca unas 220 hectáreas de cafetales maduros y nuevas plantaciones. Además, la familia Colbran colabora estrechamente con pequeños productores de la zona, brindándoles apoyo en procesamiento y comercialización. Este trabajo conjunto contribuye al crecimiento del café de especialidad en una región que, a pesar de su potencial, sigue enfrentando grandes desafíos en infraestructura y logística.

Este lote que presentamos ha sido procesado mediante el método natural clásico: tras la cosecha, las cerezas maduras se seleccionan cuidadosamente y se secan al sol sobre camas elevadas durante varias semanas. Este proceso permite que los azúcares y compuestos de la pulpa se integren en el grano, dando lugar a un perfil aromático complejo y lleno de matices frutales.

Notas de cata: tropical, dulce y cremoso

En taza, este café nos ofrece una experiencia dulce y equilibrada, con notas destacadas de fruta de la pasión y papaya, una base de té negro y caramelo, y un fondo de miel que redondea su perfil. La acidez es suave y el cuerpo, cremoso, lo convierte en una elección ideal para un espresso diferente y lleno de carácter.

Baroida no es solo un café: es la historia de una familia que ha sabido leer la tierra, adaptarse y compartir con el mundo lo mejor de las tierras altas de Papúa Nueva Guinea.